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Que su vida no se convierta en un cáncer

OMS calcula que 30 por ciento de los casos podrían evitarse si se siguen hábitos de vida saludable.

A medida que aumenta y envejece la población, los diagnósticos de cáncer en Colombia son más; y así sucede en todos los países del mundo. Esto, según los expertos, se debe a que por lo menos el 30 por ciento de los casos tiene origen en los malos hábitos y en las condiciones laborales. (Lea: A 'escuchar' esos síntomas de alarma).
En general, el cáncer es un problema mucho más grande en los países desarrollados, porque “se asocia con los procesos de industrialización y urbanización, que conllevan cambios en los patrones de vida, y Colombia ocupa un lugar intermedio. Por eso, en Estados Unidos, Chile, Argentina y Brasil, que son los países más desarrollados del continente, se presentan más casos; mientras que en África son menos, en relación con su bajo progreso”, explica la doctora Carolina Wiesner, coordinadora Grupo Área Salud Pública del Instituto Nacional de Cancerología (INC). (Lea: Reducir el riesgo en el trabajo es el gran reto).
De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) hace énfasis en que el cáncer es una de las principales causas de muerte, teniendo en cuenta que fueron determinantes en el 13 por ciento de las defunciones ocurridas en el 2008.
De ahí que también calcule que, con la puesta en práctica de lo que se llama ‘vida sana’, el 30 por ciento de los diagnósticos se podrían evitar.
“La incidencia del cáncer en Colombia, en general, se ha incrementado como consecuencia del envejecimiento de la población y del cambio en los estilos de vida, teniendo en cuenta que se ha aumentado el sedentarismo, el tabaquismo, el sobrepeso y la obesidad, principalmente”, dice la doctora Silvana Luciani, asesora regional en el programa de Enfermedades No Transmisibles de la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS).
Por ejemplo, la OMS calcula que en el 2015, en el mundo habrá más de 2.300 millones de personas con sobrepeso.
De acuerdo con datos del INC, en el 2009 se registraron 32.816 defunciones por cáncer, esto es el 17 por ciento del total de muertes. De estas, 16.113 fueron en hombres y 16.702 en mujeres para dejar una estadística de 72,6 por cada 100.000 y de 73,3 por cada 100.000, respectivamente.
En los hombres, las principales localizaciones, en su orden, se dieron en próstata, estómago, pulmón, colon y recto, y linfomas no Hodgkin; mientras que en las mujeres fueron en mama, cuello uterino, tiroides, estómago, colon, recto y ano, según datos de incidencia en el periodo 2000 - 2006.
“Algunos de los principales determinantes están dados por los cambios sociales y demográficos que Colombia ha experimentado en las últimas décadas. El primero de ellos se relaciona con la población: el número total de habitantes se triplicó en los últimos 50 años. Además, la esperanza de vida pasó de ser 48 años en 1950, a 72 años en el 2007; y la fecundidad bajó de cerca de 7 hijos por mujer, a 2,6 hijos”, dice el Plan Nacional para el Control del Cáncer 2012-2020, dado a conocer el año pasado y que tiene entre sus objetivos controlar los factores de riesgo, reducir la mortalidad evitable por cáncer y mejorar la calidad de vida de los pacientes.
Avances Científicos
Investigación permanente
La ciencia no se detiene y cada vez más se conocen adelantos que permiten hacer diagnósticos del cáncer precisos y procedimientos quirúrgicos menos invasivos, así como también se desarrollan medicamentos con efectos secundarios menos molestos para el paciente.
El doctor Carlos Castro, director científico de la Liga Colombiana de Lucha Contra el Cáncer, comenta que “Colombia está a la vanguardia y aquí se puede hacer el 98 por ciento de los procedimientos en oncología que se conocen en el mundo, porque tenemos especialistas muy bien preparados”. Igualmente, en el Instituto Nacional de Cancerología dicen que se trabaja en la detección temprana del cáncer, especialmente con pruebas moleculares.
Por ejemplo, en Colombia ya hay evidencia consolidada de las pruebas moleculares de VPH para cáncer de cuello uterino, con resultados que han mostrado una sensibilidad mucho mayor que la de la citología.
¿Cuál es la situación de los colombianos?
En Colombia hay resultados alentadores frente a la lucha contra el cáncer. Por ejemplo, la doctora Carolina Wiesner, coordinadora Grupo Área Salud Pública del Instituto Nacional de Cancerología (INC), destaca que en cuanto al gástrico ha habido descenso en la mortalidad, por el mejoramiento de la calidad de vida de la población.
“El consumo de frutas y verduras, que son factores protectores, y la refrigeración adecuada de los alimentos hacen que haya disminuido la incidencia y por tanto la mortalidad. Entonces, aunque el cáncer de estómago ocupa la primera causa de muerte en el país, está en descenso”, enfatiza.
El siguiente cáncer cuya mortalidad ha bajado es el de cuello uterino, y en las mujeres ocupa el segundo lugar, después del de mama. “Ese descenso ha sido gracias a que cada vez más las mujeres se hacen la citología y también al mejoramiento económico y social del país. Esperamos que ahora empiece a reducirse mucho más rápido, teniendo en cuenta que contamos con la vacuna contra el VPH (virus del papiloma humano) y otras pruebas moleculares que son más precisas, porque el descenso a nivel mundial ha sido de casi el 80 por ciento, mientras que en Colombia es apenas del 4 por ciento.
“En otras patologías malignas como mama, pulmón, colon y recto, en mujeres, así como pulmón, próstata y colon y recto, en hombres, hay tendencia hacia el incremento y se constituyen en un reto para los servicios de salud, porque a medida que aumenta la expectativa de vida, los casos van a ser más, así como las enfermedades degenerativas y crónicas. Por eso, se calcula que en el año 2020 se presentarán 88.000 nuevos casos de cáncer mientras que en el 2010 fueron 62.660”, advierte la experta del INC.
También la Organización Panamericana para la Salud da cuenta de un cambio en el panorama de la mortalidad por cáncer en Colombia. “En el 2000, la primera causa entre las mujeres fue el cáncer cervicouterino, seguido de estómago y mama. En el 2010, la primera causa de mortalidad por cáncer fue por el de mama, seguido por el cervicouterino y el de estómago.
“Sin embargo, la mortalidad por cáncer de mama parece disminuir, desde el 2004, a pesar de que los nuevos casos por este tipo de cáncer se han incrementado. El cáncer cervicouterino continúa siendo un problema importante que se debe seguir abordando con programas de vacunación contra el VPH en niñas y tamizaje en mujeres.
“En los hombres, el cáncer de estómago continúa siendo la primera causa de mortalidad; el de pulmón ha pasado de ser la tercera causa, en el 2000, a ser la segunda asociada en el 2010, lo que se relaciona con el incremento del tabaquismo”, dice la doctora Silvana Luciani, asesora regional en el programa de Enfermedades No Transmisibles de la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS).
La buena actitud es clave
En junio del 2011, María* tuvo fiebre muy alta y fuerte dolor en el cuerpo. Le diagnosticaron faringitis y la dejaron hospitalizada. Le realizaron un TAC, en el que detectaron que tenía cáncer renal. Luego de muchos análisis se dieron cuenta de que el riñón estaba demasiado comprometido, por lo que optaron por retirarlo en una cirugía. “Cuando me dijeron eso me dio mucho susto y cuando firmé la autorización para la operación fue como firmar mi sentencia de muerte”, dice.
Sin embargo, su familia, que es muy creyente, la apoyó en todo el proceso.
Hoy, María dice que se siente muy bien, aunque ahora es el hígado el que tiene afectado; por eso va dos veces por semana al Instituto Nacional de Cancerología para las quimioterapias. A pesar de todo esto, ha seguido su vida de forma normal.
“La gente y los doctores dicen que me ven de buen semblante y eso los asombra, pero es porque yo tengo buena actititud; es más, a veces creo que no tengo nada, solo los achaques normales, pero nada más. Para poder combatir la enfermedad hay que pensar en que uno no está enfermo, porque si uno se encierra en otro pensamiento, es perjudicial para la salud”, enfatiza.
* Nombre cambiado.
MARTHA DONNY MOSQUERA
Redactora de EL TIEMPO
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