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'No predominó ningún ejercicio democrático en la entrega de avales'

Así lo aseguró la presidenta de la Comisión Electoral de la Procuraduría, María Eugenia Carreño.

JUSTICIA
María Eugenia Carreño ve con preocupación las denuncias sobre algunas personas a quienes no se les explicó por qué no se les otorgó un aval. Dice que eso puede, a la larga, terminar en ‘guerra sucia’.
¿Qué pasó con la entrega de los avales, en la que el país tuvo que ver tantas rencillas dentro de los partidos?
La esencia del otorgamiento de los avales es que dentro de los partidos se haga un ejercicio democrático con miras a escoger a los representantes que expresen sus intereses, tanto por sus cualidades como por el bien común de la sociedad. Vemos que dicho ejercicio se desnaturalizó y que en los partidos se generaron verdaderas batallas campales. No predominó ningún ejercicio democrático sino única y exclusivamente los afectos, desafectos o la decisión autónoma de imponer a un candidato por cuenta de algún militante, senador o representante. Vimos el caso de Liliana Rendón, en Medellín, y el de Nigeria Rentería, en Chocó, que son un pálido reflejo de que las disputas internas se tradujeron en rencillas personales. (Lea: Los candidatos que generan polémica para las elecciones)
¿Cómo impactará esta realidad en las elecciones?
Podría impactar positivamente si los que no obtuvieron el aval actúan como verdaderos opositores. Pero esas rencillas personales en las que se convirtieron los otorgamientos de avales pueden enrarecer las campañas. Dan lugar a malas prácticas electorales, va a existir una guerra sucia y se van a desgranar pasiones negativas. El llamado es a que se calmen los ánimos, que se depongan los conflictos y a que los líderes recompongan el sentido de paz en sus partidos, para que el electorado no vea este debate como la guerra del más fuerte sino como la guerra de las ideas.
¿Considera que la forma en que se concedieron los avales este año constituye un retroceso?
La figura del aval tenía un propósito enriquecedor, precisamente para observar la actitud de un candidato, su grado de confianza frente a la sociedad, para que los partidos hicieran el ejercicio de demeritar o simplemente de no depositar su confianza en alguien sobre el cual pudieran existir reparos. Pero ese ejercicio deliberativo no se cumplió. Muchos de los que fueron excluidos del aval no conocieron las razones. Simple y llanamente se les dijo: no. Incluso a otros se les prometió que se les iba a dar y luego les dijeron que no en unas posturas poco serias. Entonces por supuesto que se desnaturalizó un ejercicio democrático que tenía una muy buena finalidad. (Lea: 'No predominó ningún ejercicio democrático en la entrega de avales')
¿Qué opina de los casos en los que los partidos se negaron a explicar por qué negaron avales?
Ya hay algunas acciones ante el Consejo Nacional Electoral en aras de que los partidos se pronuncien. También sé de algunas acciones de tutela. Pero esto crea un enredo jurídico porque al que ya fue inscrito, la Registraduría no tiene motivos para no dejarlo participar de la contienda, salvo una orden judicial y esta a veces no se produce en corto tiempo. Una decisión vía tutela sería un caos para la logística del proceso electoral porque ya estarían impresos los tarjetones.
En la contienda hay muchos herederos de ‘caciques’ políticos, algunos de los cuales fueron condenados por la justicia...
La posición de la Procuraduría es la de hacer un llamado a los electores para que ejerzan a conciencia su derecho al voto. Este no puede convertirse solamente en la expresión de los que están en la función pública sino que debe ser un ejercicio democrático. No votar so pretexto de las malas prácticas, de que conocieron políticos corruptos, implica despreciar la democracia y dejar que precisamente todas esas modalidades de las que nos quejamos se materialicen y se impongan. Los electores tienen la palabra frente a los candidatos. Es un tema pedagógico: si no estamos de acuerdo, siempre existe la opción del voto en blanco.
¿Cómo estamos en propaganda electoral extemporánea?
Tuvimos quejas de publicidad extemporánea en Boyacá, Santander y Cartagena, por citar algunos lugares. Además, los grupos significativos de ciudadanos aprovecharon la inscripción del Comité Promotor para encubrir o hacer publicidad política.
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