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Mundial Rusia 2018

Llegó la hora de James, la luz para alumbrar a la Selección

James Rodríguez, volante colombiano.

James Rodríguez, volante colombiano.

Foto:Mauricio Moreno /EL TIEMPO

Después de ser suplente contra Japón y jugar unos minutos, estaría de titular contra Polonia.

Han pasado cuatro años desde que James Rodríguez estampó su nombre en la cúspide. Fue en el pasado mundial, en Brasil 2014, cuando el ‘10’ de la Selección Colombia, entonces más joven, más desconocido, más terrenal, hizo que el mundo se lo aprendiera de memoria: J-a-m-e-s. La estrella bailó samba y ahora, cuatro años después, cuatro años más grande, más maduro, más estelar, alista una danza rusa.
James no sabe disimular cuando está incómodo. Cuando no juega, su rostro dibuja rabia, pinta melancolía, expresa malestar. Así se lo vio el pasado martes en el estreno de Colombia en Rusia.Él ya sabía que no iba a ser titular, y nada garantizaba que jugara unos minutos. Una molestia física lo obligó a parar, no obstante su deseo de estar en el campo.
James fue una ausencia pesada. Sin él, Colombia no solo erró el camino, también perdió esperanzas. José Pékerman tuvo que recurrir a él como último recurso. Pero James entró a recorrer el campo, no a jugar. Evidenció que no estaba para hacerlo. Y su cara no cambió.
Pero en los últimos días Colombia ha entrenado con su ‘10’. Y eso es un alivio para la Selección, para el país y para él. Todo apunta a que hoy estará entre los once titulares, un momento que sin duda él ha estado esperando, porque jugadores como James quieren estar siempre en la cancha; y si es en el Mundial, y si es con la Selección, y si es en un momento de adversidad como el de hoy contra Polonia, James se hace más fuerte.
“A los ganadores no los detienen los errores. Levantan la cabeza y esperan con paciencia la próxima oportunidad para hacerlo mejor. Confío en mi selección”, fueron las palabras de James en su cuenta de Twitter, luego de la derrota contra Japón.
Él dice que confía en la Selección, en su selección, y debe saber que todo el país confía en él, porque es la estrella que iluminó el camino de Colombia hace cuatro años y ahora alumbra las ilusiones del equipo, justo cuando hay tanta penumbra, cuando hay tanto en juego. Es la hora de James en Rusia.
PABLO ROMERO
Redactor de EL TIEMPO
En Twitter: @PabloRomeroET
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