¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo baxulaft@gmai.com no ha sido verificado. VERIFICAR CORREO

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí.

Archivo

'Si no apoyamos el proceso de paz, la única opción será la guerra'

Monseñor Luis Augusto Castro dice que, pese la crisis de los diálogos, no hay que perder la fe.

VIDA
El presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, monseñor Luis Augusto Castro, es un hombre que conoce a profundidad el conflicto armado colombiano. Ha trabajado en las regiones más apartadas y ha participado en diversas iniciativas de paz en el país.
Por eso, con conocimiento de causa, reconoce que el proceso de paz está en un momento crítico. Pero no cree que sea hora de ponerle un ultimátum. Invita al país a tener un poco más de paciencia y advierte que si no le seguimos apostando a la paz, la única opción será la guerra.
Entrevista.
Usted, y en general la Iglesia, siempre han respaldado el proceso de paz. ¿Lo siguen respaldando?
Yo creo que seguimos respaldando el proceso de paz. Pero evidentemente como parte de ese respaldo hay que ser muy crítico. Es decir, hay que hacer llegar todas las observaciones que se pueda, no con ánimo de acabarlo sino de que avance. Hay que apoyarlo, pero toca ser críticos. La paciencia del país no es infinita, tiene sus límites. En medio de lo malo que ha pasado en los últimos días al menos se pudo identificar que no fueron las Farc las autoras de las bombas que se colocaron en Bogotá. Y eso ya como que hace menos trágica la situación.
¿Cómo apoyar el proceso cuando la guerrilla sigue cometiendo acciones terroristas?
Cada una de las acciones de la guerrilla ha sido un golpe tremendo al proceso de paz. Y ojalá que reduzcan todas sus acciones, en las que han dañado la naturaleza, poniendo a las comunidades más pobres en una situación de sufrimiento muy grande. Ojalá las Farc demuestren signos de que quieren seguir adelante con toda la seriedad del caso. Iván Márquez habló de desescalamiento, o de la posibilidad de desescalamiento, y eso le daría un respiro al proceso de paz.
¿Le pediría un cese al fuego a las Farc?
Las Farc podrían hacerlo. Y no pueden esperar a que el estado colombiano lo haga porque no lo puede hacer. El Gobierno no solo se enfrenta a la guerrilla; también al ELN y a las bacrim. No puede hacerlo así, sencillamente.
¿Qué mensaje les envía a los negociadores?
Hay que darle una oportunidad al proceso de paz. Que allá en La Habana, naturalmente se agilicen los diálogos, que salgan de los nudos en los que pueden estar trabados. Pero hay que entender que no es fácil. Es importantísimo que den a conocer en qué están, que hablen de las dificultades que tienen para poder ser más realistas en el juicio final sobre cómo va el proceso. Y que dejen ver en que están trabajando. Que muestren avances, resultados. Que no hablen como un abogado le habla a un abogado, que hablen como se le habla a la gente sencilla para que se entienda de una manera inmediata.
Humberto de la Calle le puso un ultimátum al proceso. ¿Qué opina?
Creo que son expresiones de cansancio, y creo que hay que seguir adelante. Y más cuando no hay otra alternativa. La otra es la pura guerra.
¿Qué les diría a los colombianos defraudados con el proceso de paz?
Si en este momento hubiese dos procesos de paz, talvez yo les diría: apoyen otro proceso de paz. Pero no lo hay. Es el único. La otra alternativa es la guerra, seguir la guerra, acentuar la guerra. Cuando se acabó el proceso de paz en el Caguán, en esos días surgió una idea que tuvo su acogida y que fue la línea de la guerra rápida: una arremetida fuerte y decisiva contra la guerrilla. Y ahí no acabó el problema.
¿Y qué les diría a quienes creen que seguir la guerra es la salida?
Yo les pido a los colombianos que sigan apoyando el proceso de paz. Y el que quiera la guerra, como sea, que mire a sus hijos, hermanos y familiares que va a presentar para esa guerra. Que nadie se ponga a animar una guerra en la que no está dispuesta a pagar algo. Es mejor trabajar lentamente en lograr la paz que hacer una arremetida que solo traerá más lágrimas, más sangre y más muerte.
¿Qué mensaje les envía a los fieles católicos?
El mensaje a todos los católicos, que son la gran mayoría de colombianos, es que los invito a orar para que Dios les dé luces a quienes están en La Habana, para que salgan adelante en este proceso y puedan encontrar las debidas condiciones, sobre todo en temas como las reparación a las víctimas, la justicia y las penas, que son los que se están enfrentando. Oremos por ellos y por la paz de Colombia, y no nos manifestemos tan intolerantes. Están tratando un tema que lleva más de 50 años y darles un poco más de tiempo no es un pecado. Es un signo de buena voluntad y confianza de que sí es posible que salgamos de este atolladero.
Redacción Vida
VIDA
icono el tiempo

DESCARGA LA APP EL TIEMPO

Personaliza, descubre e informate.

Nuestro mundo

COlombiaInternacional
BOGOTÁMedellínCALIBARRANQUILLAMÁS CIUDADES
LATINOAMÉRICAVENEZUELAEEUU Y CANADÁEUROPAÁFRICAMEDIO ORIENTEASIAOTRAS REGIONES
horóscopo

Horóscopo

Encuentra acá todos los signos del zodiaco. Tenemos para ti consejos de amor, finanzas y muchas cosas más.

Crucigrama

Crucigrama

Pon a prueba tus conocimientos con el crucigrama de EL TIEMPO