¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo baxulaft@gmai.com no ha sido verificado. VERIFICAR CORREO

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí.

Archivo

Dejar chorritos por ahí para marcar territorio

Consejos para que su perro aprenda a hacer sus necesidades fuera de la casa.

ESTILO DE VIDA
No insista: antes de los cuatro meses, un cachorro no aprende a hacer sus necesidades cuando lo sacan o en el sitio asignado. Así que no hay castigo que valga, tal vez un rotundo ‘no, eso no se hace’, se le vaya quedando grabado.
Pero es imposible que aprenda porque hasta esa edad su cuerpo no tiene control de esfínteres, no tiene capacidad de aguantar. Así que no es un problema de actitud ni de comportamiento, sino fisiológico.
Durante este periodo, lo único que hay que hacer es tener paciencia y limpiar para que no coja mal olor ese punto.
“Lo ideal es que mientras el perro no esté supervisado, lo tengan en un sitio donde no haya lío si hace sus necesidades cuando los dueños no están. Hay que limitarle los espacios mientras empieza a superar ese periodo”, comenta la médico veterinaria y etóloga, Carolina Alaguna.
La experta aclara que ese sitio debe ser distinto al lugar donde tiene la comida y la cama. “Hay que diferenciar el espacio donde come, donde descansa y donde hace sus necesidades, así en al noche defeque u orine ahí al principio”, dice.
Después de los cuatro meses, el perro entiende y aprende todo. Y la disciplina de hacer sus necesidades (orinar y defecar) solo cuando lo sacan al parque o a caminar, o en un determinado lugar de la casa, depende más de la paciencia de su dueño que del cachorro.
Para saber que ya está reteniendo esfínteres, basta con fijarse si pasó la noche sin ensuciar. “Y en la mañana, apenas oye ruidos en la casa, quiere salir para hacer las primeras necesidades del día. Así que hay que hacerle caso y sacarlo”, agrega Alaguna, quien enfatiza que en ese momento, el animal de compañía ya debe tener todas sus vacunas.
Paseos y paciencia
La mejor forma de enseñarle que sus necesidades se hacen afuera requiere sacarlo unas seis veces al día, preferiblemente al mismo sitio. Y no se trata solo de dejarlo orinar o defecar, hay que jugarle un rato. “Hay que dejarlo que olfatee, premiarlo con una galleta o snack por haber hecho afuera, y una vez termine, no entrarse inmediatamente, puede interpretarlo como un castigo porque él está contento afuera. Por eso hay que jugarle un rato”, dice la etóloga.
Al entrar, hay que darle la primera ración de comida del día (deben ser tres), y a la media hora volverlo a sacar, aunque depende del tamaño del animal puede variar un poco.
Se repite la acción a la hora del almuerzo, entre comidas y en la noche.
“Es mejor sacarlos porque los perros también aprenden por imitación: cuando ven a otro perro haciendo pipí en un árbol, ello lo siguen”, agrega la especialista.
Además, porque les gusta marcar su territorio, por eso van haciendo de a poquitos en diferentes sitios. “La orina tiene feromonas que indican su olor característico y así avisar que estuvo ahí y que este árbol es suyo. Hay otros que marcan jerarquía”, explica Alaguna.
Si durante el proceso de aprendizaje llega a hacer sus necesidades dentro de la casa, hay que regañarlo, pero sin castigo físico. Alaguna dice que “basta con un no rotundo inmediatamente está haciendo la acción. Si pasa un rato, él no entiende porque lo están regañando. En esos caso, vale la pena llevar un registro de horarios a las que hace sus necesidades para calcular la salida”.
Hay que limpiar con quitamanchas con enzimáticos, que eliminan totalmente el olor, así ellos no vuelven a ese punto.
Tenga en cuenta
No le limite la cantidad de agua en el día o la noche para evitar que se orine; se puede deshidratar.
No lo castigue ni le pegue con periódico. Cuando son cachorros y están en proceso de socialización se asustan y crean miedos. Si eso pasa, puede estar rompiendo el vínculo con su perro.
Si se orina de adulto puede ser algo fisiológico que debe ver el veterinario, o por estrés o ansiedad, en lo que ayuda un etólogo para determinar la causa.
 ESTILO DE VIDA
ESTILO DE VIDA
icono el tiempo

DESCARGA LA APP EL TIEMPO

Personaliza, descubre e informate.

Nuestro mundo

COlombiaInternacional
BOGOTÁMedellínCALIBARRANQUILLAMÁS CIUDADES
LATINOAMÉRICAVENEZUELAEEUU Y CANADÁEUROPAÁFRICAMEDIO ORIENTEASIAOTRAS REGIONES
horóscopo

Horóscopo

Encuentra acá todos los signos del zodiaco. Tenemos para ti consejos de amor, finanzas y muchas cosas más.

Crucigrama

Crucigrama

Pon a prueba tus conocimientos con el crucigrama de EL TIEMPO