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Medellín

Antioquia es la más juiciosa en desminado humanitario

El municipio antioqueño de Carmen de Viboral también hace parte del programa de desminado.

El municipio antioqueño de Carmen de Viboral también hace parte del programa de desminado.

Foto:AFP

En esta región se reporta una de cada cinco víctimas de minas.

Aunque limpiar los 52 millones de metros cuadrados contaminados con minas antipersonales que hay en Colombia es una labor que tardaría varias décadas –según expertos–, el Gobierno se trazó una meta de cinco años.
El principal esfuerzo de la Dirección para la Acción Integral contra Minas Antipersonal (Daicma), que lidera la estrategia, se concentra en Antioquia, la región más afectada en cuanto a víctimas se refiere, en 25 años –allí, las Farc y el Eln sembraron estos artefactos en 7,2 millones de metros cuadrados–.
Sergio Bueno Aguirre, director del Daicma, explicó que Antioquia concentra el 60 por ciento de los esfuerzos de la entidad, seguida de Meta y Caquetá. Y para lograr el objetivo, trabajan en conjunto con el Ejército y organizaciones de desminado civil como The Halo Trust y Ayuda Popular Noruega. En este momento, la labor se hace de forma manual y con caninos entrenados por expertos internacionales, pero la idea es incluir técnicas modernas y nuevas tecnologías.
Según el Daicma, en el país hay 199 municipios con afectación alta; 291, mediana, y 183, baja. Y de los 125 municipios de Antioquia, 86 están contaminados; 33, con alta afectación; 38, mediana, y 15, baja.
Las zonas más azotadas en esta región del país son el corredor del Bajo Cauca, Nudo de Paramillo, Urabá y el Oriente, que a la vez, son las que mayor cantidad de incidentes de este tipo han reportado en un departamento que ya alcanza las 2.524 víctimas de minas antipersonas, el 22 por ciento de la cifra nacional (11.460).
Si bien Antioquia es la zona más contaminada, también es la que más avanza en tareas de desminado humanitario, pues ya son cinco los municipios libres de sospecha de estos artefactos, de ocho que hay en Colombia: Nariño, Guatapé y La Unión, declarados en octubre pasado; San Francisco, en el 2015, y San Carlos, en el 2012.
Otros siete municipios tienen intervenciones, y al finalizar el año, cuatro más tendrán jornadas de limpieza –otros 16 tendrán estudios no técnicos, entre ellos Medellín, donde hay sospecha de presencia de minas–.
En los próximos dos años, 42 poblaciones del departamento tendrán trabajos de desminado, y Briceño es una de las priorizadas. Allí, en la vereda El Orejón, se adelanta el desminado conjunto entre el Ejército y las Farc, acordado en La Habana.
“En Briceño, el desminado se amplío a 11 veredas para hacer el acompañamiento a la restitución voluntaria de cultivos ilícitos, también acordada en La Habana”, agregó Bueno.
La inversión entre el 2016 y el 2021 para el desminado en Antioquia es de unos 42 billones de pesos –es una de las más altas del país–; para todas las zonas afectadas del territorio nacional es de 8,2 millones de dólares.

El Orejón, en diciembre

En la vereda  El Orejón  (Briceño), los desminadores han despejado 18.755 metros cuadrados de estos artefactos explosivos. Foto: Jaiver Nieto / EL TIEMPO.

En la vereda  El Orejón  (Briceño), los desminadores han despejado 18.755 metros cuadrados de estos artefactos explosivos. Foto: Jaiver Nieto / EL TIEMPO.

Foto:

Del 13 de julio del 2015 a la fecha, en El Orejón se han despejado 18.755 metros cuadrados; en total se destruyeron 44 artefactos entre químicos y cargas explosivas.
El director del Daicma explicó que en esa vereda hay una mina cada 426 metros cuadrados, mientras que el promedio nacional es una cada 2.600 metros cuadrados.
Se prevé que en dos meses, con buenas condiciones atmosféricas, se pueda declarar a esta vereda libre de minas. El retraso se ha dado porque se amplió el polígono de intervención, que inicialmente era de unos 12.000 metros cuadrados.
Bueno dijo que tras el triunfo del ‘No’ en el plebiscito, el desminado conjunto entre las Farc y el Ejército no se detuvo: “Es un tema humanitario, un compromiso de Colombia con la Convención de Ottawa para restituir los derechos a la movilidad, al uso de la tierra, al esparcimiento, a vivir sin miedo”.
El funcionario contó que el proyecto de El Orejón dejó muchas lecciones. Por ejemplo, que es mucho más eficiente y rápido el proceso cuando se trabaja de manera conjunta con los actores armados.
No obstante, el experto en conflicto y desminado humanitario de la Universidad de Antioquia, Jorge Iván López, señaló que limpiar el territorio de estos artefactos podría tardar hasta cinco décadas, porque hay pocos mapas e información certera de los puntos afectados.
Además –expresó–, los grupos armados, en especial las Farc, fabrican minas con vida útil de hasta 50 años, difíciles de detectar y hechas cada vez con menos metales, pero con más plásticos y agroquímicos. López advirtió que el país carece de mecanismos y herramientas que se ajusten a la topografía, a la profundidad de la capa vegetal, a la humedad y a las condiciones ambientales.
DEICY JOHANA PAREJA M.
Corresponsal de EL TIEMPO
Medellín
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