La universalidad de la Iglesia podría, sin embargo, inspirar esta vez al Espíritu Santo para que el elegido no sea europeo.
Benedicto XVI saluda a la multitud, por última vez, desde el balcón de Castel Gandolfo, la residencia de verano de los papas.
El cónclave es una reunión a puerta cerrada de cardenales pertenecientes al Colegio Cardenalicio Vaticano, en la que se elige al nuevo Papa. Esta asamblea se realiza, habitualmente, en la Capilla Sixtina, dentro del Vaticano.
Publicidad